Dicen que en EEUU no se ponen de acuerdo con el
presupuesto y que podrían estar en suspensión de pagos la próxima semana.
Yo estoy deseando que ocurra, y que arrastre a
todas las economías mundiales. Que Europa se quede sin dinero, que Japón no
pueda pagar a sus bancos. Que china deje de comprar el mundo a cachitos y que
todo el dinero de los bancos centrales no sirva para nada. Que el oro deje de
ser el patrón moneda. Y que nada ni nadie vuelva a amasar riquezas inmateriales.
Que las nuevas divisas sean la harina de trigo y
para comprarla haga falta buscar agua en el centro de África.
Que el hierro pague el hormigón y que el trabajo
sea la moneda para tener ropa.
Que la cultura la enseñen los maestros, los que ya
han vivido.
Y me curen los que saben hacerlo con vocación de
juramento.
Y que haga tanta falta ser feliz que se olvide la
humanidad de alguna palabra como guerra y hambre.
Quizá el famoso trueque, que ya anda por el mundo,
vuelva con más fuerza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario